Ya empezó la cuenta regresiva para el primer Centro de Hemodiálisis de Rapa Nui, un anhelo de largo aliento de la comunidad de Isla que tras años de tratativas está a punto de convertirse en realidad.

Desde que se integró al equipo de trabajo del futuro centro, Lisebeth Rojas, enfermera clínica con vasta experiencia en el área, ha estado abocada a la tarea de contactarse con los pacientes para conocer su condición actual y analizar las posibilidades de traslado en el futuro cercano.

“Estamos trabajando y nos contactaremos con cada uno de ellos para conversar y ver las particularidades, porque cada paciente es diferente a otros”, destacó la profesional de la salud quien afirmó que la red de apoyo también es muy importante en el tratamiento de diálisis.

Sin lugar a dudas, lo que más ha retrasado la instalación del servicio que permitirá a los pacientes atenderse cerca del hogar, apunta a las dificultades presentadas en el proceso de traslado de maquinarias desde el continente.

Actualmente, se afinan los últimos detalles de la instalación eléctrica, la implementación técnica del recinto y la certificación de la calidad del agua.