Un domingo lleno de emociones fuertes se vivió hoy en Rapa Nui, durante la antesala del inicio del Festival Taputapuātea. Pasadas las diecisiete horas, comenzó a divisarce en los cielos el avión de Air Tahiti que traía a parte de las delegaciones y autoridades de las distintas islas participantes.

La relevancia de la llegada de este evento a Rapa Nui es máxima. Se trata de una celebración que honra la cultura polinésica en un clima de hermandad y creatividad lleno de arte y herencia ancestral. Para muchos, es el más importante del triángulo polinésico.

La emoción del reencuentro marcó una tarde, donde muchos volvieron a a ver a familiares y amigos después de casi cinco años.

En medio de una emotiva ceremonia de bienvenido, parte del personal municipal apostado en el terminal aéreo, trasladó a sus lugares de alojamiento para luego trasladarlos a la cena de bienvenida. Mientras otro equipo de funcionarios se encargó de la entrega de las maletas.

El espíritu colaborativo que ha marcado las jornadas previas al inicio de la celebración le ha dado mística a un festival que durante cuatro días reunirá las expresiones más caracteríticas de la cultura polinésica.

Entre las autoridades que recibieron a las distintas delegaciones, se encontrabá el encargado del equipo municipal,  Uko Tongariki Tuki, quien explicó: “Llevamos mucho tiempo preparando este recibimiento para que salga de la mejor manera posible. En los últimos días hemos estado viendo todo el tema de la alimentación y de la comida de recibimiento que les daremos esta tarde. Hemos puesto toda nuestra experiencia para enfrentar este evento y que el resultado sea el mejor posible para todos”.

Mientras unos llegaban, otros partían a Tahiti a reunirse con familiares y amigos. "es maravilloso poder tener nuevamente este punto de unión con Tahiti", aseguró, un joven que iba a reecontrarte con parte de su familia en la Polinesia Francesa.